El 25 de febrero de 1977 bajo la figura de “normalización financiera”, un operativo cívico, militar y policial tomó posesión del imponente edificio de la Biblioteca Popular Constancio Vigil. La escena casi cinematográfica que incluía el despliegue de una veintena de militares armados ingresando violentamente a la institución en busca de los responsables, marcaría el rumbo de lo que sería la Vigil de ahí en adelante. Luego de los años oscuros y con el advenimiento de la democracia, comienza una larga lucha por la recuperación de una institución que supo ser modelo de un proyecto autogestivo y socio educativo, único en Latinoamérica por su magnitud.
